Con la colaboración de un centro de estudios, Tlajomulco medirá la calidad del agua de la Laguna de Cajititlán para formar el primer diagnóstico con el que cuente y en base a éste determinar las acciones que se emprenderán para mejorar las condiciones de lo que es el mayor atractivo turístico del municipio.
La toma de las muestras, así como el estudio de las mismas, corre a cargo del Centro de Estudios Técnicos en Aguas Continentales, (CETAC) con quien el Ayuntamiento celebró un convenio de colaboración.
Por Víctor Hugo Ornelas
Durante esta primera toma de muestras llevada a cabo en cuatro puntos estratégicos de la laguna, las biólogas Norma Angélica Huerta y María Aparicio Cid, detectaron que la oxigenación del agua es considerablemente variable dentro del vaso lacustre.
En la parte cercana al malecón de Cajititlán los niveles de oxígeno fueron de cero, mientras que la zona de las playas de San Juan el nivel alcanzó un 30 por ciento de oxígeno conforme a los parámetros, en tanto que en la parte más allegada a la planta de tratamiento de San Miguel, la presencia de oxígeno en el agua fue la óptima para la laguna.
Las biólogas explicaron que la laguna alcanza los mejores niveles de oxígeno durante el día debido a la fotosíntesis, además señaló que la parte menos profunda es la que mayor oxígeno puede tener gracias a la producción del mismo por las algas.
En cuanto a la acidez y alcalinidad del agua, que se reflejan a través de una prueba de potencial de hidrógeno (PH), se determinó que las condiciones del agua son adecuadas, pues cuenta con un PH neutro.
Los resultados sobre la presencia de coliformes fecales y otras sustancias que puedan estar afectando la calidad del agua en la laguna, estarán listos la siguiente semana, pues algunos de estos estudios requieren una incubación de al menos cuatro días.
Realizar estudios sobre la calidad del agua en la laguna de Cajititlán permitirá al gobierno municipal conocer las condiciones de la misma de una manera permanente, pues estos se pretenden llevar a cabo de manera bimestral, a fin de lograr identificar el comportamiento del agua, el contenido de las cargas que recibe y cómo estas afectan o contribuyen al desarrollo del ecosistema.
En esta primera ocasión las biólogas del CETAC fueron quienes realizaron el muestreo, sin embargo la intensión es que empleados de la Dirección de Ecología sean quienes lleven a cabo esta labor cada bimestre y el CETAC sólo las pruebas, esto por cuestiones prácticas.
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