miércoles, 26 de junio de 2013

Pocas opciones en la Cabecera

La movilidad es un problema que padecen en general los habitantes del municipio, que debido a su extensión territorial y distancia entre comunidades, así como carencias en transporte público, complica el traslado dentro del propio Tlajomulco.

La prueba más clara de este problema se presenta en el corazón del municipio, la propia Cabecera, donde no existe un transporte que pueda trasladar a los habitantes de uno de sus extremos a otro.
Por Víctor Hugo Ornelas


La Cabecera Municipal cuenta con nueve calles que corren desde Abasolo hasta 2 de Abril y ocho que van de Nicolás Bravo a Higuera, sin embargo también tiene localidades que salen de estas calles, que concentran el centro de la Cabecera Municipal.

Acceder a estos puntos se puede hacer solamente a pie o en vehículo particular, pues no hay en la Cabecera un transporte que cubra estas zonas que además resultan poco accesibles para vehículos de esa magnitud y pagar un taxi todos los días puede resultar muy costoso.

“Nos andan cobrando mínimo 20 pesos de ahí del mercado (en la plaza principal) acá (la curva de los feos) y si es de ida vuelta y todos los días, imagínate, sale más caro que lo que vamos a comprar”, señaló Guadalupe, que acude regularmente a la plaza para adquirir alimentos y realizar algunas otras actividades.

Las principales calles de la Cabecera son caóticas en cuanto a tránsito vehicular se refiere debido a que en esta localidad se concentra la mayor actividad municipal y pensar en una línea de transporte para la cabecera podría ser una opción poco viable.

Esta situación pudo cambiar con la presencia de los mototaxis en la Cabecera, así lo creyeron algunos vecinos, que aunque tardaron en aceptar estos vehículos, pensaron que tendrían acceso a un transporte económico que les permitiera trasladarse con sus compras de un punto a otro, sin embargo, resultó ser que los mototaxis no difieren mucho en sus cuotas de servicio que las que cobran los taxis.

“De la calle Vallarta a la colonia que está pasando Abasolo por la Flaviano Ramos nos cobraron 15 pesos y vas brinque y brinque en la motito”, agregó la señora Coco, que lamenta las complicaciones que deben pasar para llevar el mandado a sus domicilios, pues aunado a la falta de transporte y las largas distancias, las condiciones de las calles y las banquetas fuera del primer cuadro no ayudan mucho a los vecinos que cargan con bolsas y niños.

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